Déjame Ser es una obra que refleja el diario vivir de una humilde muchacha de pueblo sencillo y laborioso en el cual viven situaciones por las que cualquiera podría pasar, a las que comúnmente llamamos "problemas".
En el transcurso de la narratoria se colige que las mejores soluciones dependerán de las actitudes y acciones que se adopten, apoyadas en gran medida en la fuerte formación espiritual y la Fe divina que atesora una persona, con las cuales es capaz de vencer cualquier adversidad, con tal de hacer culminar el don divino del Ser y el Amor. Estar consciente de lo que se quiere y se aspira es parte primordial para las soluciones adecuadas.
Es un llamado a la inmensidad de jóvenes que por alguna razón, fruto del amor, la pasión o la inexperiencia, prematuramente les llega un embarazo y siente que el mundo se desploma a su alrededor. Conlleva a pensar en la grandeza de Dios y el propósito que él tiene al permitir el desarrollo de una nueva vida en el vientre.
La escencia divina se refleja en la madre cuando puede sonreir y decir:
¡Cuánto tiempo te soñé, te sentí y esperé! Dios premió mis anhelos. Te puso en mis brazos. Valió la pena tu formación en mi vientre. Te amo con todo mi corazón y desde lo más profundo de mi alma te doy gracias por haberme convertido en mamá.