Una historia para todos aquellos que alguna vez han tenido la impresión de que no encajaban y para cualquiera que, en algún momento, haya deseado algo más de color y extravagancia en su vida.

A Iris Fallowfield se le da tan bien portarse bien que los profesores acuden a ella cuando necesitan ayuda para recordar las normas del colegio, ¡y hay muchísimas! Por
suerte, Iris las cumple sin ningún problema hasta el día que descubre un paquete descolorido de Semillas Mágicas enterrado bajo un árbol en su jardín. De repente oye voces,
ve cosas, experimenta un deseo casi irrefrenable de sembrar las semillas en lugares insólitos y totalmente marchitos para ganar la competición escolar para encontrar al
Alumno más obediente del colegio.

Y todo eso antes de que empiecen a brotarle flores en la cabeza.

Nicola Skinner decidió ser escritora cuando un tío suyo le regaló un diario por su noveno cumpleaños. Estudió Literatura Inglesa y cine en la Universidad de Glasgow, y durante años trabajó como periodista para The Guardian, The Pool, The National Trust, entre otros muchos., mientras seguía preguntándose cuándo finalmente se sentaría a escribir un libro. Entonces, al ver a su hija soplar un diente de león sobre su cabeza, Nicola Skinner tuvo la idea para su primer libro, Iris y las semillas mágicas.